martes, enero 22, 2013

No hay vuelta atrás

La mosca dibuja dos esferas perfectas antes de posarse en su cabeza, negra y espesa. Se pierde dentro de los ovillos oscuros. El aire de la habitación tiene ahora un ligero aroma metálico. El silencio no cesa. Las piernas juntas, el cuerpo hacia delante, los codos apoyados en las rodillas, permanece sentado en el sofá de cuero negro mirando al frente. Hace exactamente once minutos que su vida ha cambiado para siempre. El charco se va haciendo cada vez más grande. Aparta el pie derecho para evitar el contacto. Su mente es un saco vacío que sabe debe comenzar a llenar lo antes posible. Pero no hay chispa. Nada se enciende en él mientras es incapaz de apartar la mirada del pequeño agujero que adorna ahora la pared. La mano derecha balanceando ese objeto tan ajeno hasta entonces, aún caliente.



Escuchando: Helter skelter - The Beatles

1 comentario:

Victoria dijo...

A veces pienso que lo mejor es no elegir y así tener siempre todas las opciones disponibles...

Licencia de Creative Commons
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.